Sinopsís de la Novela


Hipócrita y pérfida es la manera en la que actué. Nada estuvo bien respecto a lo que sentía, y ahora... ahora tampoco.
¿Qué haces cuando te enamoras de alguien... de alguien en quién nunca pensaste enamorarte, de alguien a quien pretendías aborrecer? Exacto... sólo pretendía aborrecerlo.
Para contar esta historia... debo decir que el matiz perfecto para hacerlo sería blanco y negro.

martes, 15 de junio de 2010

~ Capítulo Uno

─ ¿Te has dado cuenta de eso?
─ ¿De qué? ─Inquirí buscando entre las fotografías que estaban esparcidas en la cama. Demi tomó una fotografía y la posó frente a mi rostro, agitando la otra mano incesablemente. Su aterciopelada voz se dejó oír.
─ ¡Este chico está guapisímo! ─Chilló dejándose tumbar en la cama. Yo solté una pequeña imprecación porque las fotografías que estaban ahí regadas saltaron con el colchón, desordenándose aún más.
 ─ ¿En serio? ─Inquirí con desdén cuando me mostró la fotografía que apretujaba contra su corazón. ¡Era tan Demi! En realidad, el chico no era especialmente guapo, pero era la clase de chico que hacían que mi mejor amiga se pusiera de rodillas. Y la clase de chicos que siempre le rompían el corazón.
─ ¡Sí! ¿Es que no lo ves? Ojos verdes... cabello rubio y rizado... ─Lo describió en un tono tan soñador que me hizo sentir náuseas. Pero en lugar de salir corriendo al cuarto de baño, fingí una risita.
─ Es muy... no sé, se ve raro. ¿Te das cuenta de que tiene sonrisa de maniaco? ─Chinché. Ella me dio un golpecito en la mano y sonreí.
─ Deja a mi niño. Él es guapo, guapo, muy guapo...
─ Sí, sí, claro. ─Murmuré dejando mis lentes en el buró. ─ ¿Cuándo llega Nick a la ciudad?
─ La próxima semana. ─Dijo llamando a Cook con las manos. ─¡Pequeño! ─Tomó al perrito entre sus brazos y lo apretujó contra ella. Cook era una bolita de sedoso pelo negro. Sus ojos brillaban incandesentes y cubrió de lametadas los brazos de Demi. Ella lo apretujó aún más y el perro se quedó quieto. ─Sólo te advierto que...
─ Adivino. ─Dije, y mi corazón empezó a desbocarse. ─ ¿Vendrá Joe?
─ Pasado mañana. ─Contestó Demi mirándome por debajo de sus espesas y largas pestañas. ─ ¿No irás a faltar a mi fiesta, cierto?
─ Ya veré... si no se comporta como un mandril, quizá considere no faltar.
─ ¡Winnie! Eres mi mejor amiga, ¡No puedes faltar!
─ Sabes que yo soporto tanto a tu hermano como él me soporta a mí. Cada vez que nos vemos, algo termina roto. ─Esta vez, ella rió.
─ Joe ya no es el mismo tarado de antes, me cuesta decirlo pero... creo que maduró.
─ ¿Has mencionado Joe y madurar en la misma frase? ¡Madre mía, nunca lo creí posible! ─Solté en risitas sarcásticas y ella me miró impasible.
─ ¿Cuándo dejarás la riña con él? Winnie, ambos ya no son unos niños. Es verdad que mi hermano fue un idiota a veces, pero... ─Dejó a Cook en el suelo y el perrito salió corriendo escaleras abajo. Demi se puso de pie y estiró las piernas.
─ ¿Quieres comer algo? Dios, yo me muero de hambre. ─Gimoteé buscando alguna excusa para librarme de ese interminable sermón. Salí persiguiéndo a Cook hasta la cocina y escuché los gritillos de Demi bajando las escaleras.
─ ¿Por qué has cambiado la conversación? ¡Estabamos hablando de...!
─ De Joe, ya lo sé. ─Pronunciar su nombre me abrumó. ─Pero cuando se fue de New Jersey festejé porque ya no habría pláticas como esta, sólo viene de visita, y eso no quiere decir que regresemos al mismo punto de partida. ─Saqué un par de refrescos del refrigerador y le pasé uno a ella. ─ ¿Quieres emparedado de pollo o de pavo? ─Ella soltó un bufido y dejó el refresco sobre la islilla de la cocina.
─ Algún día, Winnifred Lancaster, descubriré por qué tanto odio contra mi hermano. ─Echó una risita y se puso a ayudarme a preparar los emparedados.
Recé porque no fuera así.
Joseph iba a llegar el jueves, ¿Y mientras yo que hacía, tejer?

lunes, 14 de junio de 2010

~ Prólogo

Black & White

¿Alguien te ha dicho lo que está bien y lo que no? No, espera, no contestes a esa pregunta. ¿Alguna vez te has dado cuenta de lo que está bien y lo que no? Bah, no, es obvio que siempre nos damos cuenta, pero no queremos verlo...
La cosa es, ¿Cómo evitas hacer algo que está mal? ¿Cómo evitas enamorarte del hermano de tu mejor amiga? ¡Sí! De ese completo idiota al que has jurado odiar frente a todos... De ese patán que no deja de... chincharte la bendita paciencia y que parece King Kong cuando a su hermana respecta. De ese ciego que no se da cuenta de que no eres lo que él y el hámster que tiene por cerebro creen.
¡Ah, pero él es perfecto! ¡Claro! Graduado con honores de la Universidad de New Jersey, iniciando una maestría en Historia Universal y Música, famoso y éxitoso tanto en el medio del espectáculo como con las chicas... Dios, él podría tenerlo todo, y para colmo, tiene mi corazón. ¡Qué estupidez!

Aunque, como dice esa cursi canción, podría decirte tantas cosas de que él, que terminarías preguntándome si lo amo... y yo, también, mentiría.